Se pueden encontrar los siguientes signos y síntomas:

  • Aumento de sed.
  • Aumento de ganas de orinar.
  • Pérdida de peso.
  • Aumento del apetito.
  • Fatiga.
  • Entumecimiento/hormigueo de manos o pies.
  • Úlceras que no cicatrizan.
  • Visión borrosa.

La diabetes es una enfermedad crónica que se da por la acumulación de glucosa en la sangre. La glucosa se ingiere con los alimentos, y se transforma en energía para el cuerpo.

En la diabetes, la insulina (una hormona que ayuda a la glucosa a convertirse en energía) no es suficiente. Esto puede ser porque no se produce directamente (Tipo 1) o porque esta tiene alguna deficiencia para ingresar a la célula o no es suficiente (Tipo 2 - insulinorresistencia).

  • Edad: más de 45 años.
  • Antecedentes familiares.
  • Sobrepeso u obesidad.
  • Hipertensión.
  • Poca actividad física.
  • Hábitos poco saludables: consumo de alcohol o tabaco.

El número de personas con diabetes ha aumentado de 108 millones en 1980 a 422 millones en 2014. Los hábitos poco saludables se van incrementando en los últimos años, aumentando así el número de pacientes con diabetes.